"EL PADRENUESTRO NOS ENSEÑA A ORAR"

 "EL PADRENUESTRO NOS ENSEÑA A ORAR"

La palabra de Dios tiene poder para penetrar nuestros corazones secos, estériles y convertirlos en manantiales de vida nueva. Si dejamos que la palabra de Dios eche raíces en nuestro corazón, nos transformará a la semejanza de Dios mismo y nos capacitará para caminar en su camino de amor y santidad. Dios quiere que su palabra guíe y moldee la forma en que pensamos, actuamos y oramos. .Al leer las Escrituras, escuchamos a Cristo. Podemos acercarnos a Dios con confianza porque él está esperando con los brazos abiertos para recibir a sus hijos e hijas pródigos. Por eso Jesús dio a sus discípulos la oración perfecta que se atreve a llamar a Dios Padre Nuestro. Esta oración nos enseña cómo pedirle a Dios las cosas que realmente necesitamos, las cosas que importan no sólo para el presente sino también para la eternidad. Cuando le pedimos ayuda a Dios, afortunadamente no nos da lo que merecemos. En cambio, Dios responde con gracia, misericordia y bondad amorosa. Él es bueno y perdonador con nosotros, y espera que tratemos a nuestro prójimo de la misma manera. Padre celestial, me has dado una mente para conocerte, una voluntad para servirte y un corazón para amarte. Dame hoy la gracia y la fuerza para abrazar tu santa voluntad y llenar mi corazón de tu amor para que todas mis intenciones y acciones te sean de agrado. Dame la gracia de ser caritativo en el pensamiento, bondadoso en las obras y amoroso en las palabras hacia todos. Amén.